miércoles, 25 de noviembre de 2015

Día II

Suena algo de Andrés en la radio y tengo que volver a romperme.
Espero que la señora que me acompaña en este viaje de autobús no se entristezca mucho al verme rota,
o que sí que lo haga, y se des-lagrime un poco para llegar nueva a su destino.

Siempre me han dicho que el amor es para los valientes.
Yo digo que el amor es para los cobardes,
para los valientes es el des-amor.

El problema de entregarle todo a alguien
es que cuando ese alguien se va,
no eres nadie.

Y tienes que ser valiente,
y romperte, a veces, con Andrés
pero nunca con nadie más.

Y tienes que ser valiente,
y reconstruirte,
solo.

Y tienes que ser valiente,
y volver a creer en ti,
sin ti.

Así que no vengas y me digas que el amor es para los valientes
porque el amor es un triste escenario donde se refugian los que no son nadie
para intentar ser alguien

Valiente soy yo,
que no necesito de nadie

para ser el mejor alguien, 
yo. 




2 comentarios:

  1. Un saludo, buenas letras..
    abrí un nuevo blog podrías visitarlo cuando gustes..
    eldiariodeunescritor.blogspot.com

    Un abrazo

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  2. me gusta tu blog, yo empece uno hace poco
    puede que tengas razón y el amor sea para cobardes pero pienso que es igual a la vida que llevamos hoy en dia, dia tras ia ezforzandonos para lluegar a un lugar que verdaderamente no existe o es momentaneo

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